[…]El corolario es evidente -el dinero no da la felicidad- pero Vázquez va más allá al introducir un segundo elemento aún más dramático: el miedo a perder la felicidad. La pobreza máxima, parece decirnos, no es de quien es pobre, sino de quien se siente pobre, porque hubo un tiempo en el que fue rico y no supo verlo.
[…]
1 comentari a “La pobreza máxima”
Els comentaris estan tancats.
O sea, media país está infeliz…
Es interesante que haya cada vez más gente replanteándose qué significa estar bien. Muchos se están dando cuenta ahora, a lo bruto, en qué nivel andaban. Al menos, en qué nivel material. Hoy en una entrevista, el escritor Eudardo Mendoza también incide en una apreciación similar:
“Ara ens adonem que els darrers anys han estat una etapa de luxe, però no n’érem conscients. I per això estem com estem, perquè pensàvem que era la cosa més natural del món. Es feien extravagàncies públiques i privades. Tots en som culpables: hem actuat exactament igual que els banquers i els governs. I ningú no ha dit mai: parin!
“
http://www.ara.cat/ara_premium/cronica/EDUARDOMENDOZA-Barcelona-ciutat-equip-futbol_0_627537249.html